martes, 28 de junio de 2016

joven adulto

todos te abandonaron en un monoambiente y conseguiste un mueble y lo llenaste,
hace ocho años compraste una campera verde que hoy está de moda,
todavía prendés marlboros de camino a lugares y pensás cosas
como
el número de tus propios pasos o
la diferencia entre los perros que ladran y los que se quedan quietos en alfombritas
cuando éramos bebés en una fiesta electrónica vos fumaste y yo no y me dijiste que veías unicornios,
yo te pedí que me los describieras y me emborraché con melón mientras pensaba que me quedaba ciega.

quería quedarme ciega mientras pasaban en la tele noticias tontas mientras a vos
te abandonaban en un monoambiente y conseguías un televisor viejo y lo subías por el ascensor,
después te quedabas parado mirando el monoambiente y pensabas que era minimalista y un poco
te gustaba

tus sentidos de la combinación y de la previsión y de la decoración son hermosos
con tu campera de moda y las prendas que
conseguiste y los ascensos,
 la nueva terapia y shampúes
estás sentado solo no abandonado al mediodía
en medio del minimalismo
que con el tiempo se minimiza
mientras te instalan gigantes tecnológicos y bajás
por el ascensor el tele viejo y lo dejás en la calle
subís
y almorzás una naranja con una lata de fanta,
cortás la producción de saliva con marlboro y mirás
por la ventana un perro
que va hacia alguna parte,
estás dentro.

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